Málaga, ciudad encantadora de la Costa del Sol, captura los corazones de los visitantes con su belleza única que combina lo antiguo con lo moderno, lo tradicional con lo innovador.
El centro histórico de Málaga es un laberinto de calles empedradas, donde los edificios de estilo morisco y las iglesias históricas atestiguan siglos de historia. La catedral de Málaga, con su imponente fachada gótica, domina el panorama, mientras que la fortaleza árabe de la Alcazaba ofrece espectaculares vistas de la ciudad y del mar.
Pero la verdadera magia de Málaga se revela a lo largo del paseo marítimo. Las doradas playas bañadas por el mar Mediterráneo son un refugio de tranquilidad, donde el sonido de las olas se mezcla con la risa alegre de los habitantes locales y los visitantes. El Paseo del Parque, un exuberante jardín costero, ofrece un oasis de verdor en el corazón de la ciudad.